Garnachas

La tarde de hoy es fría, lluviosa y agradable. Me puse el impermeable y fui en busca de algo “garnachero” y que mejor lugar que el centro de donde vivo. San Bartolo Ameyalco, éste se encuentra cerca de Desierto de los leones por lo que el clima usualmente es templado a frío.

Pero como siempre, es un placer poder disfrutar los antojos de una tarde fría con algún complemento como lo es la comida. Aunque no suele ser sólo la comida también son las relaciones que llegas a tener con las personas que preparan cada día aquellas delicias que te llevas a la boca.

Hoy no se encuentran todos pese a la lluvia. Pero para los lugareños esto no suele ser problema. Tacos de bistec, longaniza, al pastor, hamburguesas, papas a la francesa, tortas, crepas, elotes, gelatinas, por mencionar algunas cosas que componen las garnachas de San Bartolo se hacen presentes, hoy son la estrella y es que sin duda este lugar me parece sin duda melancólico.

Como bien mencioné antes, las personas que hacen esto posible son los mismos que componen el lugar, se vuelven el panorama melancólico, hasta "El Rober", quien vendía tacos desde hace años y no tenía competencia alguna, claro existían otros puestos de tacos, pero ningunos como con el sazón de Roberto, quien en el 2016 murió en un accidente vial y lo único que quedó del puesto fue una caja con su foto en su memoria en el lugar donde ponía su carro, el cual ahora está oxidado afuera de su casa.

El centro del Pueblo, siempre será unos de mis lugares favoritos sin duda, cada que me encuentro ahí es como si el tiempo no pasara, mismos puestos, mismos dueños o los hijos de los que fueron dueños. El sabor está ahí concentrado en ese lugar que cada que cae la tarde surge y se fusionan.